L'amour

El amor. ¿Es una realidad, una ilusión, un ensueño, una trampa de los sentidos, un deseo transformado, una obsesión...? El amor se manifiesta de muchas maneras y a veces nos ciega o nos lastima o nos vuelve locos. Sin embargo es el motor que mueve el mundo.

A veces es correspondido, otras no, unas veces dura un verano, unos meses; otras veces dura años y de repente se evapora, desaparece sin saber el motivo.

El amor es tan extraño que la mayoría de las veces no se puede definir. O nos hace volvernos un poco tontos e irracionales.

Alex es un hombre que no conoce esa palabra ni ese sentimiento, es un novato en ese sentido, pero tiene un corazón tan grande que se entrega a él como si de eso le dependiera la vida. Alex no ha tenido amor en su vida y tampoco sabe muy bien como gestionarlo o a quién ofrecérselo y luego pasa lo que pasa. Tiene tanto amor dentro de él que no sabe dónde ponerlo y en esta ocasión ha caído en las manos equivocadas. Roxana es una chica de más o menos su edad y tampoco sabe como manejar ese sentimiento, hace lo que tiene que hacer, lo poco que ha aprendido. Ella tampoco tiene una vida fácil pero no tiene ni un pelo de tonta. Para Roxana el amor es un juego a veces y otras es una tortura y otras veces una incógnita.

Al principio me pareció una historia descabellada, una auténtica locura. No obstante este libro en general es toda una locura. Mas tarde pensé que sería positivo que el personaje experimentase ese bucle, ese laberinto y descubrir poco a poco como se iba desenvolviendo. Tenía muchas salidas que, a causa de circunstancias ajenas a su voluntad no veía, así que en vez de tejer un bonito jersey hizo un estropicio con los ovillos de lana. 

Lo mismo le pasó a su compañera sentimental. Esto ocurre casi a diario, porque las emociones humanas son tan complicadas y tenemos esa tendencia absurda a complicarlo todo que como no tengas las cosas claras y la cabeza bien amueblada lo que en un principio puede ser una fantasía maravillosa, un sueño hecho realidad, se acaba transformando en pesadilla.

Hoy por voluntad propia no deseo hablar más de este tema que da para una tesis. Mejor quiero dejar que sea el mismo lector quien descubra los entresijos de esta novela, de esta historia que se cuela entre dos mundos y saque sus propias conclusiones. Pienso que es lo correcto.

Sin más, un cordial saludo a mis desconocidos lectores.